miércoles, 6 de mayo de 2009

Cronicas de la España negra I (1º Caso)

Hoy voy a hablar sobre unos de los sucesos que profundamente conmocionaron a la opinión pública española entre 1992 y principios de 1993. Cuando se produjo, me pilló en mi tierna juventud y con mi candidez no llegué a cuestionarme nada mas allá de lo que se dijo en la prensa y en los medios de comunicación, pero el paso del tiempo, nos hace adquirir experiencia y después de unos años es posible ver unos mismo acontecimientos desde otro prisma. Por eso, hace unas semanas, en una conversación, un comentario al azar me hizo cuestionarme las primeras preguntas. Gracias a la red es posible encontrar múltiple información con la que analizar la noticia. Aunque en este, caso con tantos interrogantes, no significa que el procesar más información implique acercarse a la verdad. De hecho me recuerda mi época de estudiante en la que cuanto más estudiaba más dudas me surgían.
No es mi intención enfocar este tema desde una óptica mórbida. Por ello, he decidido no colgar ningún video ni ninguna fotografía. Quien este interesado en este u otros aspectos podrá encontrar ingente información en otros lugares. Si que voy a tratar, y a fondo, todos errores que se cometieron durante la investigación.
Supongo que ya habréis deducido a estas alturas que estoy hablando del crimen de Alcaçer. Un suceso que realmente estremece, y lo más aterrador de todo es que no estamos hablando del argumento de una película americana de terror de serie B (aunque lo parece), sino de un caso real, con victimas de carne y hueso, y cuyo principal autor (dada la crueldad del caso me voy a ahorrar el calificativo de presunto), permanece hoy en día en paradero desconocido. Es decir que casi 17 años después nada se sabe de el a ciencia cierta, incluso, quien sabe, podríamos habernos cruzado con el por la calle alguna vez, posible aunque altamente improbable. Con otro rostro y una identidad falsa. Hipótesis sobre la suerte que corrió los hay para todos los gustos, pero esto es adelantar acontecimientos. Más adelante volveré sobre este tema.


Alcaçer, viernes 13 de noviembre de 1992.

Tres amigas, Miriam, Toñi y Desiree de 14 y 15 años se disponen a ir a una fiesta de su instituto en una discoteca de moda “Coolors”. Antes deciden ir a casa de una amiga común, Esther, que se encuentra con gripe. Dice que no va a poder acompañarlas. Miriam telefonea a su padre para que las acerque a la discoteca. Sin embargo, el padre de Miriam esta en la cama con fiebre, además dice que es muy tarde para ir a ningún sitio. “Muy bien”, dice Miriam y cuelga el teléfono. Sin saberlo, el padre de Miriam ha tomado una decisión que acercaría a su hija a un fatal destino. Sin embargo, las 3 adolescentes no se dan por vencidas. A Antonia le gusta un chico del instituto que acudirá a la fiesta. Eso hace que se planteen hacer auto-stop. Consiguen parar a un coche que conduce un joven y su novia. Sin embargo el coche del joven se estropea. El joven se ve obligado a dejar el coche en el taller, ya que lo cierran a las 8, y por eso no podrá acercarlas. Miriam, Toñi y Desiree no tendrán más remedio que volver a hacer auto-stop si quieren llegar a la fiesta en Coolors. Sin duda, un cúmulo de casualidades desafortunadas que llevo a las 3 jóvenes a estar en el momento equivocado y en el lugar equivocado. Sin saberlo, se estaban metiendo en la boca del lobo.
Las luces de un Opel Corsa blanco aparecen a lo lejos. Ya es noche cerrada. Al ver que están haciendo auto-stop empieza a reducir la marcha, a la par que se acerca a ellas. Es una tarde fría. Y como mal presagio la fecha es viernes 13. El coche blanco se ha detenido junto a ellas.

-¿A dónde vais?
- Vamos a Coolors.
- Subid, que os llevo.

2 comentarios:

  1. Es cierto que suena a película americana de terror pero... los triste es que sucedio

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  2. Si Dina, ademas mira que yo no soy muy dado a creer en conspiraciones judeo-masonicas, pero leyendo un poco, la verdad es que hay cosas que huelen mal. No se si a negligencia, incompetencia o simplemente que en su momento se taparon u ocultaron cosas. Aunque sea triste creo que de vez en cuando no viene mal recordar cosas de estas para que no caigan en el olvido.

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